La Rorippa, un tesoro de pétalos blancos

Ilustración encuentro con Rorippa.

Ilustración encuentro con Rorippa.

En un rincón del Parque Nacional de Doñana, donde la tierra se entrelaza con el agua y la biodiversidad florece en su forma más pura encontramos a la Rorippa, un tesoro de pétalos blancos:

La Rorippa valdes-bermejoi. Es una planta endémica, que se aferra al soto umbrío sobre limos turberizados de Doñana, más que una simple especie; es uno de los testimonios de la riqueza ecológica y la fragilidad de los ecosistemas que hay en Doñana.

Su historia arranca en los 80, cuando Santiago Castroviejo la descubre por primera vez durante una de sus expediciones a Doñana. Sin embargo, no es hasta 1986 que su existencia se hace pública, debido a la dificultad de su identificación y a que solo contaban con dos ejemplares.

Una vez sometida a un análisis detenido, se plantean las tareas de adecuación y restauración, ya que se halla rodeada por un bosque de eucaliptos. Pero el infortunio no es ajeno a nuestra Rorippa, y desaparece misteriosamente.

El reencuentro

En el año 2002, resurge en una zona singular: el sendero del Acebrón. Se busca preservarla en un ‘corral’ adyacente al sendero. Nuestra Rorippa anhela algo que hoy en día escasea: el agua… en los suelos que habita, la más mínima variación podría trastornar su existencia de manera drástica. Otra de las causas de su problemática radica en el tipo de suelo: negro, rico en nutrientes y humedad, un tipo de suelo que escasea en Doñana.

Grupo DoñanaTour Acebrón.

Grupo DoñanaTour Acebrón.

Estas son solo algunas de las repercusiones de un cambio en el ciclo hídrico, y no serán las únicas. Sin embargo, mantenemos el optimismo y recordamos el caso del Lince ibérico. Arrastrado casi a la extinción, hoy en día su situación ha mejorado considerablemente. Confiamos en el arduo trabajo de los expertos y en el respaldo de aquellos encargados de su cuidado.

 

Estos son algunos de los valores y conocimientos que transmitimos en DoñanaTour.

 

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FUENTES:

Imagen Rorippa valdes-bermejoi: https://www.juntadeandalucia.es/medioambiente/portal/documents/20151/662944/ODIEL_JULIO_2020.pdf/5f5f6f4e-68d3-c8ce-b13c-e3043482f42f?t=1611304493715

 

Historia de la geografía de Doñana

Primeros pasos

En el suave susurro de las dunas y el murmullo de los pinares, se entreteje la historia de la geografía de Doñana, un santuario natural que guarda entre sus granos, secretos milenarios. En el corazón del suroeste de España, entre las provincias de Huelva, Sevilla y Cádiz, se encuentra un tesoro de biodiversidad y paisajes cambiantes, donde el río abraza al mar y las marismas dan vida a un ecosistema único en Europa.

Esbozo de Doñana.

Las primeras luces bañan las dunas, donde el viento rumorea antiguos secretos, por allí se hallan las huellas de familias de elefante mediano Palaeoloxodon antiquus, ciervos Cervus elaphus, lobos Canis lupus,  ¡hasta toros de dos metros Bos primigenius! Y a nuestros ancestros. Hace 106,000 años (± 19) , los neandertales deambulaban por estas tierras, dejando su impronta en la arena y forjando una conexión ancestral con Doñana.
Recreación hecha por J.M.Galán.

Recreación hecha por J.M.Galán.

Historia actual de la geografía de Doñana

 

Pasarán unos miles de años y procesos erosivos con mucha energía que irán formando la doñana que conocemos hoy en día. Entre 1270-1300, la «Ermita de Santa María de Las Rocinas» fue ordenada a levantar por Alfonso X «El Sabio»;  florece un paisaje impregnado de devoción y fervor, emerge la romería de El Rocío, un espectáculo de fe que convoca a miles de peregrinos cada año, quienes, entre cánticos y oraciones, rinden homenaje a la Virgen del Rocío, patrona de Almonte.

 

Santuario de Nuestra Señora del Rocío, El Rocío, Huelva.

Pero la historia de la geografía de Doñana no solo se teje con hilos de espiritualidad, sino también con las labores ancestrales de sus habitantes. Los carboneros, expertos bolicheros, extraen la esencia de los bosques para convertirla en carbón, mientras que los piñoneros se afanan a la copa de los pinos para la recolección de los preciados piñones que se esconden en los pinares. Los coquineros, con sus mañas y arte, danzan con las mareas para atrapar el sustento del mar, las coquinas, luchando contra viento, agua, luz y penumbra. Y entre las marismas, los constructores de chozas marismeñas erigen refugios que desafían al tiempo, testigos silenciosos de una forma de vida arraigada en la tradición y el respeto por la naturaleza.

Coquinero en las costas de Doñana.

Carboneros de Doñana.

Así, entre huellas ancestrales, devoción ferviente y usos tradicionales, se entrelaza la historia de la geografía de Doñana, un lienzo vivo que nos invita a descubrir la riqueza de un territorio que perdura en el tiempo.

Grupo DoñanaTour acantilado del Asperillo.

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FUENTES:

 

 

 

Agradecimiento particular a José María Galán por permitirnos el uso de su interpretación.

La diversidad de los ecosistemas de Doñana

La diversidad de los ecosistemas de Doñana

 

Entre arenas y olor a sal se encuentra un lugar muy particular; ese lugar se llama Doñana. Un sitio único desde muchos puntos de vista, el tema que tratamos hoy:

La diversidad de los ecosistemas de Doñana.

La diversidad de los  ecosistemas de Doñana siempre ha sido cambiante; Doñana ha sido distinta a lo largo del tiempo y la Doñana que conocemos hoy tan solo lleva entre nosotros 6000 años aproximadamente. A lo que en tiempo geológico, no llega ni a un parpadeo pero en esos 6000 años se han formado los ecosistemas tal y como los conocemos hoy.

El primer ecosistema de Doñana  es el más conocido y empleado actualmente por las personas, si piensa en la playa…

Correlimos tridáctilo "Calidris alba"

Correlimos tridáctilo Calidris alba en la playa de Doñana.

¡Correcto!

Es un ecosistema en continuo cambio debido a la acción del viento y de las olas; a veces con progradación (avance) y otras con retrogradación (retroceso) de la línea de costa.

Pero… ¿Cómo es esto posible?

El viento y las olas mueven los granos de arena (movimiento de deriva litoral) moldeando la línea de costa con cada temporal.

Un poco más adelante en el límite superior de la pleamar se puede encontrar restos de bivalvos (conchas) y restos de peces. Este último es aprovechado por gaviotas (patiamarilla, sombría, etc.), además, suelen encontrarse correlimos en este límite aprovechando los pequeños invertebrados. Lo siguiente que se encuentra son las dunas embrionarias, estas son el límite superior de nuestro ecosistema y en él encontramos la vegetación más valiente, ya que lucha contra el viento que azota la costa y el spray salino que hay en el ambiente. No es un super poder pero hay que poder, ¿Y cómo lo hace? Utilizando adaptaciones como pueden ser raíces muy profundas, en el caso del barrón Ammophila arenaria, y otro tipo de adaptaciones como pueden tener la viborera Equium gaditanum, el cardo marítimo Eryngium maritimum, la azucena de mar Pancratium maritimum y otras.

 

El siguiente ecosistema que nos muestra la diversidad de los ecosistemas de Doñana, por cercanía, son las dunas; con una estrecha alianza entre viento y arena, este ecosistema se va formando durante miles de años. Se trata de un sistema dunar (hilera de dunas) que se ve arrastrado por la acción del viento hacia el interior del parque. Las primeras, dunas móviles, solo se ven retenidas y formadas por las especies vegetales como la clavelina Armeria pungens, siemprevivas Helichrysum picardii y otras especies, algunas ya mencionadas anteriormente, que van moldeando el paisaje. Una vez pasada esta línea, llegamos al siguiente cordón dunar donde se

Cordón dunar P.N. Doñana

hacen presente especies como el enebro marítimo Juniperus oxycedrus subsp. macrocarpa o el pino piñonero Pinus pinea. Este último conforma parte del paisaje interior y los corrales dunares, dejando tras el paso de la duna las llamadas cruces de Doñana o campo de cruces.

Corral dunar

Corral dunar P.N. Doñana

 

Este ecosistema da paso al siguiente: las marismas. Pero antes, fruto de la unión de marismas y dunas, nace la vera. La vera no es considerado un ecosistema de Doñana, es más efímero aún. Es un ecotono, el ecotono nace por la surgencia de agua subterránea, dado el límite entre arcillas y arenas de la capa del suelo. Esta zona tiene una increíble biodiversidad y es de vital importancia para la fauna local, pues hace a veces tanto de abrevadero cuando el agua escasea para herbívoros como zona de campeo para carnívoros.

Y ahora sí, la marisma. La estampa de la diversidad de los ecosistemas de Doñana, joven, nacido de tsunamis y hechos de grandes crecidas que fueron colmatación, depositando sedimentos y cerrando el antiguo lacus ligustinus, antiguo lago romano. Poco a poco, aparecerá la Doñana que conocemos hoy en

Dirección incidencia tsunamis

día, una de las razones de la grandeza y de la diversidad de los ecosistemas de Doñana: Las aves. Garzas, garcillas, águilas, avetoros, flamencos, cigüeñuelas y hasta casi 100 especies solo en las marismas de Doñana; hace de este sitio ideal para la observación de avifauna.

Para finalizar, El coto o el monte. Histórica zona de aprovechamiento, culto y tradición. Es además, zona donde el rey de Doñana es encontrado, el lince ibérico, este ser que ha sido llevado al borde de su extinción y rescatado después de un largo proceso que aún a día de hoy sigue. Uno de sus «títulos nobiliarios» el de ser «especie paraguas»; Esto significa salvar un sin fin de especies dado que para su conservación es necesaria una gran cantidad de terreno y, por tanto, toda la diversidad de los ecosistemas de Doñana que se encuentre en él será protegida también. Árboles, lagartijas, insectos y aves se podría decir que son protegidas gracias al lince ibérico.

Lince ibérico Lynx pardinus

 

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FUENTES: