La Rocina, entre alas y agua

Entre las arenas de Doñana a escasos 5 minutos en coche de El Rocío y a 20 minutos a pie, podemos encontrar La Rocina, entre alas y agua. Un sitio cargado de historia; zona de reserva para la fauna local controlada por los Duques de Mediana Sidonia y primera casa de Luis Pedro Espinosa Fondevilla. El arroyo de la Rocina nace desde el mítico pueblo de Palos de la frontera donde comienza su andadura para luego unirse a con el  arroyo Don Gil y vencer La Rocina  ante arroyo Don Gil. También se le añaden arroyo como el del Playazo, Santa María y La Cañada de las Garzas.

La Rocina

La Rocina.

Sus habitantes

En esta zona tan especial podemos hallar una gran diversidad de aves y pájaros. Moritos comunes, garzas, garcillas, zampullines, flamencos, ánsares o milanos negros son solo una pequeña  muestra de las especies que se pueden encontrar en esta zona tan especial.

Morito común.

Morito común.

En este sendero, además, podemos encontrar una representación de una casa típica rociera de antaño que nos trasporta a una época hoy ya olvidada. Una vez dentro,  podemos dar sentido a frases como «poner la mesa» o comprender los modos de conservar la comida.

Ánsares comunes.

Ánsares comunes.

Adentrados en el sendero encontraremos los distintos  observatorios. El observatorio del paraguas o del meloncillo son sitios ideales para fascinarnos con las aves y su comportamiento; y de paso aprender sobre ellas.

 

 

Si desea aprender, observar y disfrutar sobre aves ¡No dude en unirse a nuestras visitas guiadas!

 

Estos son algunos de los valores y conocimientos que transmitimos en DoñanaTour.

 

 

¡Gracias y hasta nuestro próximo tour con DoñanaTour!

La leyenda de un palacio escondido “El palacio del Acebrón”

Como en los cuentos de nuestra infancia, esta historia comienza en un lugar muy muy lejano, donde nace la leyenda de un palacio escondido “El palacio del Acebrón”. Uno de los cinco grandes bastiones de Doñana, ahora reducidos a solo cuatro testigos en pie.

Palacio escondido. Foto NVZ.

Palacio escondido. Foto NVZ.

Este palacio es construido por Luis Pedro Espinosa Fondevilla en los años sesenta; surgido de un halo de celos dado que su hermana, Francisca “Paca” Espinosa Fondevilla, era dueña del Palacio de Coto del Rey y gozaba de gran renombre por la zona. Posición anhelada por él.

Ojos que engañan

Luis concebía su palacio desde otro punto de vista, en estas líneas desvelaremos una idea. Al poner un pie en el recinto del palacio descubrimos que su fachada no nos recibe de frente sino orientada a la salida de los equinoccios.

Una vez delante de su fachada se aprecian niveles o al menos acabados distintos, desde la escalera hasta el águila que la corona. Cada nivel tiene un trazado distinto, desde uno más rugoso a un blanco que deslumbra con sol intenso, una escena común en estos parajes.

Palacio del Acebrón

Palacio del Acebrón

Los aviones comunes, Delichon urbicum, pájaros que se ven apoyados  en la fachada, nos guían hacia el emblema LEF haciendo referencia a Luis Espinosa Fondevilla, pero ¿Y Pedro? se preguntará, aquí juega con el lema «Liberté, Égalité et Fraternité», pista de la vertiente de pensamiento de Luis.

Al adentrarnos, la primera planta desvela una interpretación de la vida de Luis con un amplio salón, cuadros e incluso frescos que emulan estar en la Capilla Sixtina. Esto nos conduce a la inevitable pregunta: si el fin de un palacio es presumir de posición y ostentación, ¿Por qué construirlo en un lugar tan recóndito? ¿Qué fin tiene tanto lujo apartado?

Primera planta.

Primera planta.

Os invitamos a nuestras actividades para desentrañar estas preguntas y agradecemos vuestra lectura en nuestro Tour.

 

 

Estos son algunos de los valores y conocimientos que transmitimos en DoñanaTour.

 

 

¡Gracias y hasta nuestro próximo tour con DoñanaTour!

La Rorippa, un tesoro de pétalos blancos

Ilustración encuentro con Rorippa.

Ilustración encuentro con Rorippa.

En un rincón del Parque Nacional de Doñana, donde la tierra se entrelaza con el agua y la biodiversidad florece en su forma más pura encontramos a la Rorippa, un tesoro de pétalos blancos:

La Rorippa valdes-bermejoi. Es una planta endémica, que se aferra al soto umbrío sobre limos turberizados de Doñana, más que una simple especie; es uno de los testimonios de la riqueza ecológica y la fragilidad de los ecosistemas que hay en Doñana.

Su historia arranca en los 80, cuando Santiago Castroviejo la descubre por primera vez durante una de sus expediciones a Doñana. Sin embargo, no es hasta 1986 que su existencia se hace pública, debido a la dificultad de su identificación y a que solo contaban con dos ejemplares.

Una vez sometida a un análisis detenido, se plantean las tareas de adecuación y restauración, ya que se halla rodeada por un bosque de eucaliptos. Pero el infortunio no es ajeno a nuestra Rorippa, y desaparece misteriosamente.

El reencuentro

En el año 2002, resurge en una zona singular: el sendero del Acebrón. Se busca preservarla en un ‘corral’ adyacente al sendero. Nuestra Rorippa anhela algo que hoy en día escasea: el agua… en los suelos que habita, la más mínima variación podría trastornar su existencia de manera drástica. Otra de las causas de su problemática radica en el tipo de suelo: negro, rico en nutrientes y humedad, un tipo de suelo que escasea en Doñana.

Grupo DoñanaTour Acebrón.

Grupo DoñanaTour Acebrón.

Estas son solo algunas de las repercusiones de un cambio en el ciclo hídrico, y no serán las únicas. Sin embargo, mantenemos el optimismo y recordamos el caso del Lince ibérico. Arrastrado casi a la extinción, hoy en día su situación ha mejorado considerablemente. Confiamos en el arduo trabajo de los expertos y en el respaldo de aquellos encargados de su cuidado.

 

Estos son algunos de los valores y conocimientos que transmitimos en DoñanaTour.

 

¡Gracias y hasta nuestro próximo tour con DoñanaTour!

 

 

 

 

 

 

FUENTES:

Imagen Rorippa valdes-bermejoi: https://www.juntadeandalucia.es/medioambiente/portal/documents/20151/662944/ODIEL_JULIO_2020.pdf/5f5f6f4e-68d3-c8ce-b13c-e3043482f42f?t=1611304493715

 

Historia de la geografía de Doñana

Primeros pasos

En el suave susurro de las dunas y el murmullo de los pinares, se entreteje la historia de la geografía de Doñana, un santuario natural que guarda entre sus granos, secretos milenarios. En el corazón del suroeste de España, entre las provincias de Huelva, Sevilla y Cádiz, se encuentra un tesoro de biodiversidad y paisajes cambiantes, donde el río abraza al mar y las marismas dan vida a un ecosistema único en Europa.

Esbozo de Doñana.

Las primeras luces bañan las dunas, donde el viento rumorea antiguos secretos, por allí se hallan las huellas de familias de elefante mediano Palaeoloxodon antiquus, ciervos Cervus elaphus, lobos Canis lupus,  ¡hasta toros de dos metros Bos primigenius! Y a nuestros ancestros. Hace 106,000 años (± 19) , los neandertales deambulaban por estas tierras, dejando su impronta en la arena y forjando una conexión ancestral con Doñana.
Recreación hecha por J.M.Galán.

Recreación hecha por J.M.Galán.

Historia actual de la geografía de Doñana

 

Pasarán unos miles de años y procesos erosivos con mucha energía que irán formando la doñana que conocemos hoy en día. Entre 1270-1300, la «Ermita de Santa María de Las Rocinas» fue ordenada a levantar por Alfonso X «El Sabio»;  florece un paisaje impregnado de devoción y fervor, emerge la romería de El Rocío, un espectáculo de fe que convoca a miles de peregrinos cada año, quienes, entre cánticos y oraciones, rinden homenaje a la Virgen del Rocío, patrona de Almonte.

 

Santuario de Nuestra Señora del Rocío, El Rocío, Huelva.

Pero la historia de la geografía de Doñana no solo se teje con hilos de espiritualidad, sino también con las labores ancestrales de sus habitantes. Los carboneros, expertos bolicheros, extraen la esencia de los bosques para convertirla en carbón, mientras que los piñoneros se afanan a la copa de los pinos para la recolección de los preciados piñones que se esconden en los pinares. Los coquineros, con sus mañas y arte, danzan con las mareas para atrapar el sustento del mar, las coquinas, luchando contra viento, agua, luz y penumbra. Y entre las marismas, los constructores de chozas marismeñas erigen refugios que desafían al tiempo, testigos silenciosos de una forma de vida arraigada en la tradición y el respeto por la naturaleza.

Coquinero en las costas de Doñana.

Carboneros de Doñana.

Así, entre huellas ancestrales, devoción ferviente y usos tradicionales, se entrelaza la historia de la geografía de Doñana, un lienzo vivo que nos invita a descubrir la riqueza de un territorio que perdura en el tiempo.

Grupo DoñanaTour acantilado del Asperillo.

Estos son algunos de los valores y conocimientos que transmitimos en DoñanaTour.

 

¡Gracias y hasta nuestro próximo tour con DoñanaTour!

 

 

FUENTES:

 

 

 

Agradecimiento particular a José María Galán por permitirnos el uso de su interpretación.